martes, diciembre 28, 2004

y estoy llamando a cesar
a ese que conozco que viene desde otro planeta
a cubrirme con su abrazo
el que me da su mano y camina sin temor sobre vidrios rotos
estoy clamando la voz pausada que trae sociego
y la mirada clara y firme que se enfrenta al sol que se oculta lentamente.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo también lo busco , algunos días creía que me visitaba tomaba conmigo un café y después se marchaba dejándome unas ganas de vivir inaguantables, un corazón nuevo y toda la energía para continuar. Pero de pronto pasaba el tiempo y no regresa, y la vida se consumía lentamente, y sólo lo esperaba... esperaba que regresara y me acompañara siempre... yo seguía allí esperando y la espera era cada vez mas larga hasta que aprendí a disfrutarla; y sabes, me di cuenta que no tenia que buscarlo, que él nunca se había ido, él estaba allí siempre lo estuvo, sólo hacia silencio, se escondía en mis preocupaciones, en mis tormentos, en mis miedos entonces lo encontré y siempre lo encuentro cuando aprendo a dejar de lado todo, sólo para verlo.

Gina

Anónimo dijo...

“El guerrero no siempre tiene fe.Hay momentos en los que no creo absolutamente en nada. Y pregunta ¿Valdrá la pena tanto esfuerzo?. Pero el corazón continúa callado . Y el guerrero debe decidir por si mismo...el guerrero continua sin fe. Pero sigue adelante y la fe terminará volviendo”